A lado de la playa, con una terraza exterior con vistas al mar, te sentirás como si estuvieras en Italia. El local de 700 m2 está rodeado de cristales y los techos están formados por vinilos. El restaurante simula la presencia en un barco, con dos salones (comedor y biblioteca), los servicios como camarotes y el pasillo como la proa. ¡Te esperamos!